13 pasos para una limpieza profunda del baño

En esta entrada os vamos a enseñar a llevar a cabo una limpieza a fondo de vuestro baño.

Es muy recomendable darle un repaso a vuestro baño todos los días. Y al menos una vez por semana, realizar una limpieza en profundidad.

Antes de empezar la limpieza, hay que tener los productos de limpieza ordenados y preparados. Tenerlos organizados ayuda a no perder tiempo. Los elementos esenciales son desinfectantes, limpiadores, esponja metálica, cepillo de cerdas duras y paños. También son útiles guantes de látex para usar los productos y para la limpieza de los suelos, una escoba y una fregona.

1. Despejar el suelo.

Para poder limpiar el suelo con comodidad, sacad fuera del aseo todos los objetos voluminosos que estorben, como la báscula, papeleras, el cesto de ropa sucia o taburetes. Aprovechad para vaciar la papelera y echad las toallas a lavar.

Si vais a hacer una limpieza en profundidad, os aconsejamos apartar también los objetos de las superficies como jaboneras, cepillos de dientes, cosméticos, etc.

2. Barrer y quitar polvo.

Cuando tengáis despejado el suelo, es el turno de barrer el suelo y quitar el polvo de las superficies. Os aconsejamos retirar el polvo con aspirador y gamuza, para atrapar la suciedad.

Aunque en otras ocasiones os hemos advertido de empezar con la limpieza de las superficies más elevadas, en este caso es al contrario.

Es mejor comenzar por el suelo ya que el polvo puede esparcirse y puede volver a ensuciar las superficies limpiadas anteriormente.

3. Dejar actuar los productos de limpieza.

Con el polvo ya retirado, es el momento de aplicar los productos de limpieza.

Comenzad aplicando el desinfectante en el inodoro, para que tenga más tiempo de actuar, ya que es el lugar más sucio de la casa.                                                                                                                  

Luego, en este orden, se echa el limpiador en la mampara, los azulejos, la bañera, el lavabo y el bidé (si tenéis). Dejando actuar a los productos de limpieza, la suciedad se irá ablandando y será más fácil de retirar posteriormente.

No debéis rociar los productos directamente sobre las superficies. Se echan en los paños y trapos y se pasan por las áreas a limpiar. De esta manera se evita el desperdicio del producto y que los líquidos dejen manchas. Utilizad trapos y bayetas específicas para cada superficie, sobre todo para el inodoro.

4. Azulejos del baño y mamparas.

Después de dejar actuar los productos, podéis poneros a limpiar los primeros en los que habéis aplicado los líquidos.

La primera parada son los azulejos del baño y las mamparas de la bañera o la ducha.

Para los azulejos, usad una toalla vieja grande y limpia. Así abarcáis más superficie y se puede retirar en pocas pasadas el limpiador.           

La mampara de la ducha suele acumular jabón, cal y salpicaduras de agua. Podéis emplear una mezcla de amoniaco y agua con papel de periódico. Esta mezcla también se puede utilizar para limpiar los cristales de las ventanas del baño.

5. Paredes.

Para la limpieza de paredes, podéis usar una mezcla de agua caliente con agua y lejía, mediante un trapo. Enjuagad las zonas con agua limpia para quitar los restos de la mezcla.

Centraros en las áreas de alrededor de la taza del váter y la ducha/bañera, los zócalos y las juntas.

Para eliminar el moho del baño, podéis utilizar una escoba y una toalla vieja. Así accederéis más fácilmente a las partes altas del aseo. Para las juntas o rincones más inaccesibles, utilizad un cepillo de dientes viejo.

6. Bañera y ducha.

Es el turno de la bañera/ducha. Con el grifo de la ducha, podéis aclarar el producto de limpieza. Ayudaros de una esponja húmeda y pasadla por los bordes y grifos. Para secar la bañera o la ducha, podéis utilizar la mencionada toalla grande vieja que se ha usado para limpiar los azulejos.

Aunque lo ideal es adecentar la bañera o la ducha después de cada uso, ya que si la suciedad se acumula se tarda más tiempo en eliminarla. 

Si vuestra bañera o ducha acumula cal, un truco para su limpieza es mezclar vinagre blanco y agua. Si presentan moho, eliminadlo con un fungicida. Además, si queréis recuperar su color blanco original, utilizad un blanqueador de cerámica.

7. Cortinas.

No hay que olvidar la limpieza de las cortinas de la bañera o ducha.

Después de cada ducha o baño, se debe dejar la cortina bien extendida, para que pueda secarse. Si queda con pliegues, será ahí donde se acumule la suciedad. Igualmente, debéis asear la cortina de vez en cuando, con un paño empapado en salmuera y aclararla después de 15 minutos.  También podéis meter la cortina en la lavadora.

Si hay moho, un consejo es eliminarlo con lejía diluida en agua o con un fungicida.

8. Lavabo.

El lavabo se limpia con la ayuda de un paño o esponja que contenga limpiador.

Además del lavabo y el mueble del lavabo, hay que limpiar el interior y el exterior del grifo. También tiene especial atención el desagüe, para evitar que se produzcan atascos.

Cuando ya ha hecho efecto el limpiador, eliminad los restos de la pila con el agua del grifo. Para su secado, retirad el producto sobrante de la grifería y encimera con un paño limpio y seco.

Si siguen persistiendo manchas de moho o de óxido, utilizad mezclas de amoniaco o lejía con agua. Dejadlas actuar brevemente y enjuagadlas. Finalmente, pasad un paño por el lavabo para retirar los restos.

pasos para limpiar el baño como limpiar el baño limpieza de baño limpieza de aseo

9. Bidé.

Si contáis con bidé, seguid los mismos pasos que con el lavabo. Retirad con un paño limpio el producto que habíais dejado actuar en el interior y la grifería.

10. Inodoro.

Al dejar su limpieza para el final, se consigue que el desinfectante y limpiabaños actúen más tiempo y eliminen las bacterias acumuladas.

Para su limpieza, se usa limpiabaños con desinfectante en el interior y en el exterior de la taza. Podéis ayudaros de un cepillo. No olvidaros del borde, donde la suciedad se acumula. Tampoco os dejéis el asiento. Se dejan actuar los productos y finalmente, tiráis de la cadena para aclarar con el agua que cae.

Si el inodoro tiene cal, usad vinagre blanco sobre las manchas. Después de dejarlo actuar, vaciad la cisterna para eliminar los restos.

Lo ideal en la desinfección del inodoro es limpiarlo diariamente, sobre todo si lo usan varias personas. Igualmente hay que hacer una limpieza profunda semanalmente.

11. Espejo.

Para su aseo, pasad un paño con limpiador por su superficie y rincones. Con otro trapo o limpiavidrios, eliminad el exceso de producto. Si queréis un resultado brillante y evitar que se empañe con el vapor del agua caliente, podéis hacer el último aclarado con agua mezclada con vinagre en un paño. Después lo secáis con un trapo de algodón.

12. Fregar el suelo.

Ya solo queda por limpiar el suelo. Para su fregado, podéis emplear una mopa o fregona.

13. Colocar todo en su sitio.

Por último, con el suelo limpio y seco, podéis volver a colocar en su sitio los objetos que estorbaban. También poned toallas limpias.

Además, se deben guardar los productos de limpieza usados. Los utensilios como esponjas, escobillas y cepillos también deben ser lavados y desinfectados con frecuencia.

¿De qué otras maneras limpiáis y desinfectáis vuestro aseo?

Desde Jelos & Guadalaviar os podemos ayudar si necesitáis una limpieza profunda de vuestra casa o baño.

CONTACTO

Si tenéis alguna duda o sugerencia, podéis contactar con JELOS&GUADALAVIAR a través de nuestro número de teléfono 96 395 32 57, WhatsApp 695 693 902, Telegram o nuestro e-mail ? info@jelos-guadalaviar.es.

Os informamos de nuestros servicios de limpieza y mantenimiento en la provincia de Valencia. En nuestra web encontraréis descritos con detalle todos los servicios que ofertamos.

También podéis seguirnos en nuestras redes sociales: LinkedIn, Facebook, Instagram y escribirnos una reseña con vuestra experiencia en nuestro Google My Business.

¡Hasta el próximo post!